La cartera es un accesorio que denota el estilo de la persona que la lleva consigo. Desde los modelos más elegantes hasta los más deportivos, lo utiliza todo el mundo. Tiene la capacidad de ser versátil y cómodo para los más variados usos.
Desde los modelos más pequeños aptos para llevar solo monedas o billetes hasta los más grandes que permiten introducir una chequera o un gran número de tarjetas.
Debido a su versatilidad, la cartera sigue siendo un accesorio muy personal, tanto para hombres como para mujeres.
Historial de la cartera
Antes de la billetera había bolsos, monederos, monederos. Como nos enseña el cine, hasta el siglo XVII, las personas llevaban monedas (pequeñas o grandes cantidades) atadas al cinturón con hilos de cuero y colgadas del hombro.
Una forma inconveniente, pero sin duda efectiva, para aquellos obligados a transportar con seguridad algo de valor.
Pero Es solo con la introducción de los billetes que podemos tener un primer vistazo a la historia de la billetera moderna.
Una herramienta que ha estado siguiendo a los hombres desde finales del siglo XIX. (y recientemente las mujeres) en la vida cotidiana.
Los primeros ejemplares de carteras se fabricaban curtiendo cueros de vaca y equino, estaban equipados con un bolsillo en el que introducir billetes y documentos. Más cómodas que las viejas bolsas, pero bastante voluminosas.
Será recién en la segunda mitad de 1900 con la introducción del crédito tarjetas y de las tarjetas que tomará forma la billetera moderna.
Esta billetera, que ha tomado varias formas, aunque permanece sin cambios en la sustancia, tiene la posibilidad de insertar documentos, billetes, monedas y tarjetas de crédito en un espacio compacto y fácilmente transportable
La única innovación durante los años 70 cuando se introdujo el cierre velcro, pasando así a diseñar carteras más compactas y juveniles.
Tipos de monederos
Poder dividir los distintos tipos de monederos en distintas categorías no es absolutamente fácil, esto se debe a que hay formas híbridas y no siempre distintas.
Sin embargo, en el espíritu de innovación que distingue a Bewmer, intentemos ilustrar los tipos más comunes (antiguo y nuevo).
Cartera delgada
Es la cartera contemporánea por excelencia. No apta para todo el mundo, es innovadora, ocupa poco espacio, pero no es para ti si vives con la angustia de perderla.
La razón es simple, es una billetera delgada y minimalista.
No hay peso y por lo tanto parece no tenerlo contigo.
El carnet de conducir, una tarjeta de débito, una tarjeta de crédito, la tarjeta Esselunga y algunos billetes.
En la práctica tendrá a su disposición un documento en formato delgado
Algunos dicen que al no mostrar el bulto del bolsillo de la billetera, hay menos riesgo.
Como con muchas cosas, es cuestión de costumbre.
No apto si eres del tipo de moneda
Cartera plegable
Absolutamente el favorito de los hombres. Un diseño generalmente clásico, lo suficientemente grande como para poder insertar todo, desde documentos, hasta monedas, billetes de banco.
Es adecuado para todos y no muestra una hinchazón excesiva, evitando así al propietario ir acumulando demasiados documentos en su interior.
Al ser pequeño, es cómodo de llevar en el bolsillo del pantalón y chaqueta
Es una elección atemporal y siempre útil. Muy recomendable
Cartera triple
La billetera perfecta para el empleado promedio de los años 80 y 90 en Nueva York. Hoy en día es un accesorio poco útil y en cualquier caso tiene la capacidad de acumular archivos completos en su interior.
Un reemplazo válido al clásico maletín 24 horas (¿todavía se usan?) Pero por lo demás hay poco que decir.
No va a hacer eres anticuado o poco atractivo. Sin embargo, es una billetera que por sus características es apta solo para aquellos que son extremadamente ordenados y pueden hacer una limpieza maníaca de su billetera.
Monedero con ranura
Para ser claros, una billetera clamshell de esas que se abren con monedero y poco más.
A bolso siempre es útil. En los países europeos son bastante comunes, también por el uso que se hace de ellos.
Aunque los tipos clásicos suelen ser un poco voluminosos, sobre todo si se comparan con un clip para billetes o una billetera plegable, los modelos de tragamonedas son muy prácticos.
Billetera de viaje
Una cartera que no encaja en el día a día pero que es súper recomendable si tienes familia y necesitas irte de vacaciones.
Es una cartera en la que introducir todos los documentos necesarios, desde pasaportes (que requieren mucho espacio), hasta billetes y tarjetas.
Se puede atar alrededor del cuello, aumentando así la seguridad del dueño y minimizando la posibilidad de perderlo.
¡Ojalá!
Billetera de cheques
La cartera del hombre de negocios.
Cabe perfectamente en el bolsillo de la chaqueta y no suele ser muy voluminosa.
Suelen hacerse en vertical, se encuentran en horizontal, todas con una forma más alargada que las carteras normales.
Cartera Bewmer
Luego están nuestras carteras, donde hemos incluido nuestra idea para personas dinámicas.
Una cartera con un diseño minimalista y elegante, donde puedes llevar tarjetas y billetes
Un sistema de bloqueo funcional que protege las tarjetas para que no se caigan cuando se cae la billetera.
Finalmente, la práctica Función RFID que te permite llevar contigo tus tarjetas y documentos de forma segura, evitando el riesgo de clonación de documentos.
Hay carteras para todos los gustos, bolsillos y necesidades.
Una billetera dice mucho sobre el estilo de una persona, pero lo más importante es que sea práctica y que puedas tener todo el espacio que necesitas durante el día.
Las carteras Bewmer están hechas para combinar elegancia y practicidad. Encuéntralos